El 12 de enero de 1963, Ramón Goméz de la Serna fallece en Buenos Aires, capital de su exilio. Pocos días después, el 23 de enero, sus restos mortales llegan a España para ser enterrados en el Panteón de Hombres Ilustres de la Sacramental de San Justo, en la misma sepultura que su admirado Larra, que se encuentra en el patio en el que también reposan los restos de los padres de Gómez de la Serna. Gómez de la Serna es uno de los grandes renovadores de la literatura española del siglo XX. Introductor de las vanguardias, vanguardista él, barroco y conceptista, humorista serio, creador de un ismo personalísimo, el ramonismo, retratista de la palabra, pintoresco, anfitrión de banquetes, tertulias y homenajes literarios, subversivo, buscador de lo inverosímil, costumbrista, brillante, esteta, experimental, personaje en sí mismo, maestro de nuevas corrientes y tendencias literarias, precursor y anheloso de escribirlo todo de otra manera porque siente que ha llegado la
El escritor y periodista Marino Gómez-Santos donó a la Universidad Rey Juan Carlos su Fondo Documental Personal (FDMGS) formado por unos 70.000 documentos gráficos, sonoros y en papel, en los que se recoge una parte relevante, y muchas veces íntima, de la historia de España del siglo XX. El archivo se encuentra en una sala de acceso restringido de la Biblioteca del Campus de Fuenlabrada. En este blog mostraremos periódicamente sus contenidos a partir de un personaje, un tema o un acontecimiento.